84 CHARING CROSS ROAD

Me ha parecido una novela encantadora, llena de afecto y humor.La pasión por los libros forja una amistad entrañable durante algo más de veinte años entre una escritora americana y una librería inglesa. Lo mejor de todo es que se trata de una historia real.

A veces las reseñas son tan desacertadas, que si uno se basara en ellas jamás llegaría a joyas como esta, gracias a dios no hice caso a ninguna. Este libro es un deleite, y una joya para aquel bibliofilo que muchos de nosotros tenemos dentro, pidiendo libros por correo a librerías lejanas que tratan de satisfacer nuestro exigente gusto. También me da pena que alibrate haya elegido esta portada, a mi gusto la clásica amarilla de anagrama es la ideal para reflejar el contexto de este libro. Esa mujer estadounidense que se anima a solicitar mediante correo unos libros a una tienda en Inglaterra va a ocasionar sin querer una de las mejores correspondencias a lo largo de 20 años, me sentí parte del personal de la tienda, y disfruté cada página de este corto libro.

Tengo el corazón encogido y una cantidad de sentimientos encontrados ahora mismo. Estas cartas reflejan formalidad al principio que con el pasar del tiempo se convierte en complicidad. Helene nos muestra algo íntimo, nunca pensó que se convertiría en un libro publicado y que tantos otros como yo terminaríamos emocionados con tan linda historia de amistad. No sabía que necesitaba este libro hasta que lo leí. 💕

Amé este libro. y saber que son cartas reales lo hace aún más perfecto y románticamente triste. Me hizo tener ganas de volver a escribir cartas en papel, tener amigos por correspondencia y añorar un tiempo que esta desapareciendo entre tanta tecnología.

La amistad de una lectora con sus libreros al otro lado del océano es una belleza. Su solidaridad con estos amigos lejanos me conmovió profundamente. De lo poco que tenía les dió mucho, en cartas afectuosas y a veces cargadas de ironía cultivó amigos verdaderos.

84, Charing Cross Road es una obra epistolar en la que se recopila la correspondencia mantenida, a lo largo de 20 años, entre los empleados de una librería de Londres y una clienta que hace sus pedidos desde EEUU. La protagonista, una escritora de obras de teatro que vive con estrecheces económicas, se pone en contacto con una librería londinense para que le faciliten los títulos que en Nueva York no consigue encontrar. Comienzan a tener una relación comercial que empezará a tomar matices de amistad cuando Helene es consciente del racionamiento de alimentos que sufren en Inglaterra tras la guerra y comienza a enviar paquetes de comida. Lo que engrandece esta obra es el amor a los libros expresado en cada una de las misivas, todas ellas reales, no sólo en cuanto a texto se refiere si no también a sus encuadernados, textura del papel e incluso a los aromas que desprenden. Una obra muy breve, de fácil lectura que, aunque al principio resulta repetitiva, te va enganchando para conocer el desenlace. Feliz lectura!!!

Una pequeña gran joya que a base de correspondencia, entre una escritora—lectora, y su librero, tomaremos nota de un montón de libros, además de ser testigos de como afectó la guerra a los ciudadanos de Londres (en este caso) y como una firme amistad, conquistada por una correspondencia epistolar fluida y sincera, nunca falla, para las buenas y las malas, aunque haya un océano de por medio.

Nunca me ha atraído especialmente la literatura epistolar pero este libro me ha encantado. Muy ameno,me ha divertido y enganchado desde el principio.